Desde una relación de confianza, respeto y aceptación, el profesional a veces acompaña, otras guía a la persona para desarrollar recursos que le permitan afrontar las dificultades que le generan malestar y sufrimiento.
Consideramos que el proceso de psicoterapia ha de tener una duración definida así como un foco de trabajo explícito, para lo que proponemos cuatro fases diferenciadas: